sábado, 6 de abril de 2013

DESIDERATA




                                  Anda plácidamente entre el ruido y la prisa, y recuerda la paz que se puede encontrar en el silencio. En cuanto te sea posible, Vive en buenos términos con todas las personas, enuncia claramente tu verdad; escucha a los demás, incluso al torpe e ignorante; ellos también tienen su historia. Evita las personas ruidosas y agresivas, pues son un fastidio para el alma, Si te comparas con los demás, te volverás vano y amargado; porque siempre habrá personas más grandes y más pequeñas que tú. Disfruta de tus logros así como de tus planes. Mantén el interés en tu propia carrera, por humilde que sea; ella es un tesoro en el fortuito cambiar de los tiempos, se cauto en tus negocios; pues el mundo está lleno de egoísmos, Pero no te cierres a la virtud que hay en ella; mucha gente se esfuerza por alcanzar nobles ideales; y en todas partes la vida está llena de heroísmo, se tú mismo. En Especial, no finjas el afectos. Tampoco seas cínico en el amor; porque medio de todas las aridez y desengaños, es perenne como la hierba. Acata dócilmente el consejo de los años, abandonando con donaires las cosas de juventud. Cultiva la fuerza del espíritu para que te proteja en la adversidad repentina. Pero no te angusties con fantasmas. Muchos temores nacen de la fatiga y la soledad. Junto con una sana disciplina, se benigno contigo mismo.


                                           
Tú eres una criatura del universo, no menos que los plantas y las estrellas; y tienes derecho a existir, y sea que te resulte claro o no, el universo marcha como debiera.

Por lo tanto, manténte en paz con Dios, cualquiera sea tu modo de concebirlo y cualesquiera sean tus trabajos y aspiraciones, mantén la paz con tu alma en la bulliciosa confusión del planeta, que con todas sus farsas y sueños fallidos, sigue siendo hermoso. Ten cuidado. Esfuérzate por ser feliz.

(La desiderata de la felicidad, escrita en 1927 por Max Ehrmann.)
 

 


6 comentarios:

  1. Habrá que hacerla caso, a veces se nos olvidan estas cosas tan simples para ser felices. Un besazo.

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  2. Tienes razón, Tamara , no se por qué se nos olvidan más las cosas simples que las complicadas y sin embargo las más simples son las que más felices nos hacen.
    Un abrazo

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  3. Hla Charete, cuanta razón tiene lo que escribió Ehrmann, tendremos que hacerle caso ya que seguro nos ira mucho mejor, a veces no hacemos mas que darle vueltas a las cosas cuando a lo mejor el camino es mas corto y sencillo.
    Que pases un buen día y espero que no os este lloviendo, aquí ayer en un momento cayo la de dios:)

    Besos.

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  4. Es cierto Pirujilla , a veces nos " comemos" el coco demasiado y no creo que eso sea bueno para nadie , hay que vivir el día , el ahora , porque es lo único que tenemos seguro , el pasado , pasó y el futuro no lo tenemos , así que hay que vivir y sentir el momento presente, el pasado solo tiene que servirnos para aprender lo que debemos hacer o no hacer , solo para eso.
    Por aquí estamos volando , desde ayer es imposible ir a caminar aunque no llueve . Un abrazo grande

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  5. Hola Charo. Aquí estoy para agradecerte tus visitas a mi blog y para compartir pensamientos y reflexiones en este mundillo de vivencias literarias y humanas. Un beso.

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  6. Gracias Concha ! me alegro que nos sigamos mutuamente , es un placer conocerte . Habrás visto que yo también escribo y lo hago desde pequeña . Espero que podamos compartir muchas cosas más durante mucho tiempo.
    Segiré tus actualizaciones encantada .
    Un abrazo

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